En el diagnóstico se puede observar el tipo y condición de la piel y es de vital importancia identificar los tipos existentes de piel: Piel seca, grasa o mixta; las condiciones que puedan afectar los tipos de piel: Dermatitis, Acné, Pigmentaciones, entre otras; y por último también evidenciar los fototipos cutáneos para que se proporcione un diagnóstico dermatológico existoso.

Los diagnósticos verbales son preguntas dirigidas a los pacientes con base a reacciones alérgicas o predisposición que tenga el paciente hacia algún medicamento y/o sustancia, teniendo en cuenta lo anterior se puede llevar a cabo un tratamiento u otro.

De igual forma, en el diagnóstico visual se observa al detalle el estado de la piel en nuestros pacientes como por ejemplo si tienen acné, pigmentaciones, envejecimiento, arrugas, líneas de expresión, se evidencia el tamaño de los poros, el color de las manchas y si el paciente presenta irritaciones.

Por último, en el diagnóstico tactil se procede a tocar la piel de los pacientes para identificar algún tipo de secresión, grosor, resistencia de la piel al tacto debido a algun dolor, entre otras cosas.